Mal agüero
cuando grita el muchacho:
¡Nunca más la verás, nunca en tu vida!
Mal agüero
cuando corren los galgos
con tantos cazadores tras la liebre.
Dulcinea
sólo estará en tus lágrimas,
mordiscos de tu amor, llaga del tiempo.
Mal agüero
los lobos por la Mancha
del caballero andante derrotado.
¡Don Quijote,
no es cristiana la fe
que alimenta creer en los agüeros!
Las quimeras
huyen de la locura
como huye Dulcinea del Toboso
de tu sueño.
No hay caballero andante
por sierras ni por valles ni por trochas.
No hay pastor
en los montes, ni ovejas ni pastoras.
Ya la muerte se acerca.
Duro está el alcacel para zampoñas.
González Alonso
Sobre el Quijote ( II, 73) (Poema de estructura áurea)